Peeling

El peeling químico es un tratamiento no quirúrgico que consiste en la descamación o exfoliación más o menos profunda de la piel dependiendo del ácido usado, para poder corregir defectos estéticos como manchas, arrugas, estrías, cicatrices, acné, flacidez cutánea…

Normalmente se usan diferentes ácidos: glicólico, salicílico, fenol… y se logra un cutis más luminoso, uniforme, compacto y elástico.

El peeling puede ser superficial, medio o profundo. La intensidad del peeling estará relacionada con la profundidad de las lesiones.

Cada paciente tiene su tratamiento personalizado y es un tratamiento rápido simple e indoloro.